miércoles, 9 de octubre de 2013

Cumplidos

Entre sus muchos trabajos, CLAMP posee un tomo autoconclusivo llamado "The one I love"; una serie de pequeñas historias sobre la vida de diferentes mujeres y sus situaciones sentimentales. Desde una chica que termina con su novio y conoce a alguien que le atrae pero es menor que ella, hasta otra con un novio, un mangaka que se hunde en trabajo y al que, a pesar de vivir juntos, apenas tiene tiempo de ver.
Una de estas historias narra la prerrogativa de una chica que piensa que "bonito" es un cumplido futil. Cualquier cosa puede ser "bonita": una prenda, un artículo, una expresión. Todo mundo usa "bonito" para todo, todo el tiempo. El problema va cuando el chico que le gusta la llama "bonita"...

Personalmente comparto este pensamiento en cierta manera. Un cumplido hacia al aspecto físico de alguien puede ser dicho por cualquier persona, relacionada o no contigo. Ni su veracidad ni su intención puede ser comprobadas, y es esto lo que me dificulta tomarlo muy en serio, como algo convincente que pueda añadir a mi concepción de mí misma. Un "bonito" de una persona que conoces, alguien a quien estimas se siente como una reafirmación de este lazo que ya se tiene, es más una manera de expresar cariño que de expresar una opinión, lo que coloquialmente llamamos "ver con ojos de amor".

He visto varios debates la situación de que el amor entra por los ojos. A un desconocido no puedes atinar decir un cumplido fuera de su aspecto físico porque no conoces a esa persona, ¿cómo piropear sus ganas de vivir, su responsabilidad, su serenidad, su calma, su alegría, su confianza, su perspectiva de vida, sus buenos valores cuando es la primera ves que le miras? Aún así pienso que el lenguaje corporal, la expresión del rostro, la elección de la ropa, la actitud, su saludo, su tono de voz puede decirte cosas que pueden o no ser dignos de un cumplido.

Los cumplidos "específicos" son los que siento un poco más sinceros, más que algo vago, por compromiso o la repetición de un discurso que hemos escuchado, puesto que infiere un raciocinio detrás de esas palabras, que no son un gasto innecesario de palabras, fue una decisión bien pensada de la otra persona a halagarte.


Él se sienta a mi lado desde el día uno, dos horas, una vez por semana. No hablo con nadie más que él. ¿Qué tanto puedes conocer a una persona en ese lapso de tiempo, si a su vez tienes que atender la clase? Y sin embargo hablamos, y reímos, y discutimos, y usamos una sola computadora porque el Finale sólo sirve en la mía, y nos miramos, y luego desviamos la mirada, y luego no decimos nada.

Dejo que él maneje las cosas, excepto ese día, ese día era yo quién movía la batuta.

-Te sientes poderosa. -me dice y asiento y río. Mi lectura es mejor, así que hago las cosas más rápido: dos horas es suficiente para adelantar mucho trabajo.

-Y ya te crees mucho -dice, se sonríe y mira la pantalla- porque eres una mujer inteligente -volteo al término "mujer" en vez de "chica"-... una mujer capaz que puede hacer multitareas.

Cantidad de albañiles y mecánicos y misóginos en la calle me han dicho "lindura", "mamacita", "preciosa", "hermosa", montones de chicas que no tenían nada qué decir me dijeron "te ves súper bien" "¡ay, hermosa!", pero en mi vida nadie me había llamado "mujer inteligente, capaz, que puede hacer multitareas".

Cumplidos.

1 comentario:

  1. Hace lo años que compraba conexión manga, regalaban precisamente ese tomo de CLAMP D; tesoritos bien underground que los autores suelen hacer debes e cuando. Lo lanzaban en concurso pero yo soy esas de las que nunca se anima a participar por miedo a perder su tiempo xD meh, he cambiado un poco, me puedo dar cuenta de lo absurdo de la frase. Es cierto que las palabras se gastan o se naturalizan. Eso para mi representa un problema, lo que provoca que las palabras ya no sean suficiente, porque son comunes y cualquier persona puede usarlas cuando y como le plazcan.

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